miércoles, 24 de septiembre de 2008

Charlie contra todos.



La estética de Chaplin siempre se constituyó en una importante herramienta de rebeldía contra el capital y sus sostenedores, no eran simples obras artísticas sin contenido, sino por el contrario, estas lograban relacionarse con el público y explicar las cosas más complejas de una forma cómica y sencilla; el gran actor podía agitar conciencias y al mismo tiempo ridiculizar a las clases dominantes, se burlaba de los explotadores y confrontaba al capitalismo, a la vez que desarrollaba una pantomima atrayente en historias comunes en las que se refería a la vida de los oprimidos y ofrecía esperanzas a los explotados.


Una de las películas que nos plantea con nitidez la propuesta de Chaplin por vincular los planteamientos políticos con el cine es “Tiempos modernos”, obra que se la estrenó en Nueva York el 5 de febrero de 1936; en ella aparece el artista como un feroz acusador, confronta a la burguesía y denuncia la explotación de que son objeto los trabajadores en el proceso de producción de mercancías.


Tiempos Modernos es una sátira de los problemas que tienen los sectores populares frente a la mecanización social y técnica de la producción, “es una rigurosa crítica sobre los problemas económicos y sociales de la América de la depresión y se universaliza a través del personaje de Charlot, convertido en la imagen de millones de obreros sin trabajo que arrastran la angustia y la desorientación del vagabundo”.


Este tema no fue un descubrimiento de pura casualidad, sino que se constituyó en una respuesta a las tensiones políticas a las que se encontraban sometidos los trabajadores en el periodo de entre guerras; según Charles Chaplin, “la gente estaba dominada por un caos mental. Me pareció un buen tema para la película. El único medio era burlarse de toda nuestra malparada situación, reírse de los tiempos modernos. Producimos mucho, pero nos encontramos con que no podemos disponer de lo que producimos.” Las clases dominantes después de ver esta película lanzaron una intensa campaña contra la obra y su director, los sectores conservadores de la sociedad norteamericana levantaron sus gritos de indignación y lo trataron de estigmatizar y callar. A pesar de aquello, Chaplin no se amilanó y el 15 de octubre de 1940 es proyectada por primera vez “El gran dictador” en un momento en la que la situación política y social se encontraba convulsionada con los días de en que se desarrollaba la II Guerra Mundial.


Mientras los trabajadores se levantaban contra el fascismo en todo el mundo, Charles Chaplin construía una obra que se constituyó en una impresionante sátira contra el fascismo en general y contra Hitler y Mussolini en particular.


En El Gran Dictador se ridiculiza al más tirano de los dictadores, desnuda las verdaderas caras del fascismo y desenmascara los intereses que tenía Hitler, pero Chaplin no solo se queda en la valiente denuncia, sino que por primera vez hace que hable el Vagabundo y en el discurso final de la obra logra exponer una declaración de amor y de guerra al momento que señala “Vosotros el pueblo, tenéis el poder, el poder de crear máquinas, ¡el poder de crear felicidad! Vosotros, el pueblo, tenéis el poder de hacer que esta vida sea libre y bella, de hacer de esta vida una maravillosa aventura. Por tanto, en nombre de la democracia, empleemos ese poder, unámonos todos. Luchemos por un mundo nuevo, por un mundo digno que dará a los hombres la posibilidad de trabajar, que dará a la juventud un futuro y a los ancianos una seguridad!”.


En los días que se estreno “El Gran Dictador” Chaplin realiza una actividad intensa en contra del belicismo imperialista y se toma las tarimas de los mítines en contra de la Guerra organizados por el Partido Comunista norteamericano, en ellos Charles Chaplin llama a los pueblos a realizar acciones contra el fascismo y apoyar el trabajo que desarrollaba la URSS por liberar a los sectores oprimidos.


Terminada la II Guerra Mundial, en los EEUU se impulsa una política para desterrar todo género de “actividades antinorteamericanas”, “limpiar” de los Estados Unidos toda clase de actividad comunista, por lo que se crea “El Comité de Actividades Antiamericanas”, comité que tenía el objetivo de liquidar a los responsables de las películas que se consideraban contradictorias a las políticas del imperialismo o eran de filocomunistas.


Por el odio que Chaplin se había ganado en toda su vida de actor y de director de cine, es que al finalizar su película Candilejas, liquida sus negocios en Estados Unidos y se embarca con su mujer y sus cuatro hijos rumbo Inglaterra, donde estrenara su película. Después de una vida intensa y con el orgullo de haber dado un importante aporte al desarrollo del séptimo arte, a los 88 años, el día de navidad de 1977, muere en Suiza el mayor icono del cine del siglo XX, Charles Chaplin.

domingo, 6 de julio de 2008

miércoles, 18 de junio de 2008











John Leslie (Jackie) Coogan (
26 de octubre de 19141 de marzo de 1984).



Nació en Los Ángeles (California) y comenzó su carrera como actor a corta edad en vaudeville y cine, con un rol no acreditado en la película de 1917 Skinner's Baby. Charlie Chaplin lo descubrió en un vaudeville, haciendo el "shimmy", un popular baile de la época, en el escenario. Su padre, Jack Coogan, Sr. era también un actor. Coogan asombró a Chaplin con sus mímicas y movimientos corporales. Como actor infantil, su película más exitosa fue junto a Charles Chaplin en The Kid (1921) y por su rol en Oliver Twist de Frank Lloyd el año siguiente. La escena en The Kid donde es apartado del vagabundo interpretado por Chaplin y arrojado a la parte trasera de un camión por los agentes del servicio social es una de las escenas más famosas del cine. Fue una de las primeras estrellas en tener un gran número de mercancías como crema de cacahuetes, artículos de papelería, silbatos, muñecos y figuras. Incluso viajó internacionalmente y fue recibido por grandes multitudes. Muchos de sus primeros trabajos están perdidos o son invaluables.


Coogan se alistó en el ejército de los Estados Unidos en marzo de 1941.
Después de la guerra, regresó a la actuación, apareciendo principalmente en la
televisión. Su rol más importante fue el tío Lucas en la serie The Addams Family.




















miércoles, 16 de abril de 2008

119 ANIVERSARIO




El 16 de abril de 1889 nació Charles Chaplin, actor, director, escritor, productor y compositor británico.
Charles Spencer Chaplin Jr., KBE (Londres, 16 de abril de 1889 – Corsier-sur-Vevey, 25 de diciembre de 1977) El personaje en torno al cual construyó gran parte de su carrera cinematográfica, y que le dio fama universal, fue aquel del vagabundo (The Tramp, en inglés; Charlot, en español, italiano y francés): un hombre con las maneras refinadas y la dignidad de un caballero, vestido con una estrecha chaqueta, pantalones y zapatos más grandes de su talla, un sombrero bombín, un bastón y un característico bigote. Su inconfundible caminar oscilante, una acentuada emotividad sentimental, y un desencanto melancólico frente a la impiedad y a la injusticia de la sociedad moderna, le hicieron emblema de la alienación humana — en particular de las clases sociales emergentes.
Biografía .
Charles Spencer Chaplin nació en East Street, Walworth, Londres el 16 de abril de 1889, Inglaterra, según dijo él mismo, ya que en ningún sitio consta documentación oficial de su nacimiento. Su madre fue una actriz de teatro que vio truncada su carrera debido a que padecía esquizofrenia. Su padre era alcohólico, por lo que la familia vivía sumida en la terrible pobreza urbana de esa ciudad a finales del siglo XIX. Creció en el barrio de Kennington, rodeado de muchos actores del music-hall. Su padre fue un cantante del music-hall. Charlie quedó al cuidado de su madre cuando sus padres se separaron, poco después de su nacimiento. Su padre murió cuando Charlie tenía 12 años, y junto con su hermano Sidney pasó largos períodos de tiempo en orfanatos. Charlie era zurdo, al igual que sus hijas Geraldine Chaplin, Tania Chaplin, Suso Chaplin y Dolores Chaplin
Los comienzos.
Charles, con su hermano Sidney, dos años mayor, habían heredado el talento artístico de la familia y comenzaron a trabajar en ello desde niños. Cuenta el propio Charlie que su primera aparición pública fue a la edad de 5 años, sustituyendo a su madre en un teatro londinense. Ahí empezó a trabajar como actor infantil en el teatro, y recibió buenas críticas. Mientras, su hermano se había convertido en una de las estrellas del grupo cómico de Fred Karno, y convenció a éste para que contratara a su hermano para hacer un sketch, y posteriormente, lo envió de gira por Estados Unidos, a comienzo de la década de los años 1910.
El cine.
Con estas giras, Mack Sennett le ofreció un contrato, y se fue con él a California. Fue allí donde Chaplin descubre el mundo del cine y pronto recibe propuestas que lo llevan a probar suerte en Hollywood. Al llegar a la meca del cine ya tenía una buena reputación como comediante y rápidamente se encontró protagonizando películas que tuvieron un éxito inmediato. En su primera película, Charlot periodista, todavía no tenía la imagen que le caracterizaría siempre, pero ya en la segunda Carreteras sofocantes, en 1914, llevaba su indumentaria de vagabundo. Parece ser que el famoso traje se lo compuso mediante aportaciones de cómicos amigos: la chaqueta de Charles Avery, los pantalones de Fatty Arbuckle, las botas de Ford Sterling, y el bigote de Mack Swain. En todas sus posteriores películas interpretó a un vagabundo que buscaba mejorar su vida sin conseguirlo nunca. La población que buscaba el «sueño americano» se identificaba con estas historias y las aventuras del vagabundo tuvieron éxito continuo durante más de diez años, aunque el personaje fue evolucionando. Por aquel entonces, Chaplin ya cobraba 10.000 dólares a la semana, más extras. Empezó a rodar películas cada vez más complejas y con unos gags mucho más elaborados que en sus películas anteriores, como Charlot en la playa (1915), The Cure, 1917), o Charlot a la una de la madrugada (One A.M., 1916), y tocó temas muy críticos con la realidad norteamericana, como El emigrante (The Inmigrant, 1917) o Charlot músico ambulante (The Vagabond, 1916).
El chico.
En otoño de 1917 volvió a cambiar de productora, esta vez firmó para la First National, con la que colaboraría en los siguientes años, y que le consiguió su estudio en el que rodaría la mayor parte de sus películas. Allí hizo películas como Vida de perro (A Dog's Life, 1918) o Armas al hombro (Shoulder Arms, 1918). Fue entonces cuando rodó El chico (The Kid, 1921), con el niño Jackie Coogan, que acabó por convertir a Charlot en uno de los iconos, no ya del cine, sino de la historia. Este largometraje es una de las piezas más fascinantes en la historia del cine y sin duda es de las mejores que haya realizado Chaplin. Tal es así que en el año 1971 él volvió a componer la música de la misma. La película tiene como eje central la importancia del amor humano, de los afectos y como siempre una alta crítica social. La misma cuenta la historia de un hombre que encuentra, adopta y decide criar a un bebé que fue abandonado por su madre. La relación entre ellos dos (Charlot y el niño) es fantástica y muy enternecedora, a tal punto que lleva al espectador al llanto. Esta cinta fue tan importante para él porque buscó mostrar en el niño, lo que había sido su propia infancia. La filmación duró más de un año y en la misma Chaplin tuvo que afrontar varios sucesos importantes que marcaron su vida. Siendo ya millonario, regresó a Europa sólo para buscar y llevarse a su madre a América, que se encontraba recluida en un sanatorio mental. Pese a esto, ella nunca sería consciente del triunfo de su hijo debido a su estado mental.

lunes, 10 de marzo de 2008

Pagina 12 - Segunda Entrega




Los cortos remasterizados reúnen valiosas creaciones cinematográficas, como Carmen, Carlitos renace, Carlitos tramposo y Carlitos trabajador, realizadas entre 1915 y 1916, cuando el cómico tenía 26 años, y sorprendentemente actuales a través de sus gags, su ironía desbordante y su estructura narrativa.

Fue el primer gran comediante del cine, un título honorífico que hasta ahora nadie ha demostrado que correspondiera a otro. La sola mención de su bigote recortado, su bombín y su bastón alcanzan para actualizar el icono, pero también las imágenes famosísimas de algunas de sus obras cumbre, que también son a esta altura símbolos: el hombre contra las máquinas de la Revolución Industrial en Tiempos modernos, la sátira al fascismo de El gran dictador, la escena inmortal de El pibe, con el vagabundo y el mendigo sentados en el cordón. Además de una extensa producción de largos, Chaplin tiene una prolífica obra de cortometrajes. Página/12 reunió varios de esos cortos remasterizados en la colección mensual El gran cómico, cuya segunda entrega presentará con la edición de mañana los cortos Carlitos renace, Carmen, Carlitos tramposo y Carlitos trabajador.

lunes, 25 de febrero de 2008

Chaplin - movie icons -





Los libros de la editorial Taschen que he podido ojear, son ejemplares con muchas y buenas fotos en los que lo importante es el material gráfico y no el texto.Este libro sobre Chaplin, sigue esta dinámica. Los textos son muy escasos: un par de páginas sobre la vida del cineasta y los piés de página de las fotos. Aquí lo importante es ver fotos y más fotos de Chaplin en sus películas, en los rodajes o en su vida privada.

El libro es de un tamaño pequeño pero está muy bien editado. No es un ejemplar para conocer datos sobre la trayectoria de Chaplin, pero es un libro bonito de consultar para deleitarse con las imagenes que contiene. Además, la edición incluye los textos en tres idiomas: español, italiano y portugués; por lo que los textos todavía son más escasos.

ALGUNAS IMAGENES CONTENIDAS EN EL LIBRO:





miércoles, 20 de febrero de 2008

Chaplin para jovenes principiantes.





Libro en forma de historieta para aquellos que no son asiduos a la lectura. Entretenido recorrido a lo larga de la vida de Charlie para jovenes y tambien para adultos ...


martes, 5 de febrero de 2008

Pagina 12 - Primera Entrega



Carlitos se enamora, Carlitos en el parque, Carlitos vagabundo y Carlitos principiante, títulos que componen el primer DVD de una serie de cuatro, demuestran la vigencia de Charlot.
Charles Chaplin podría llamarse, con toda justeza, el primer gran comediante del cine. Actor, director, guionista, productor y más, varias de sus películas son hitos del séptimo arte gracias a escenas construidas con profunda sensibilidad y sin perder el sentido del humor. Pero además de sus obras cumbres, como El gran dictador o El pibe, Chaplin tiene una extensísima filmografía de largos y cortometrajes. Cortos como los que Página/12 presentará a sus lectores mañana, día de publicación del primer DVD de la colección El Gran Cómico, que pondrá al artista de bigotito, bombín y bastón en primerísimo plano.

Cada primer domingo de febrero, marzo, abril y mayo, se pondrán a la venta sendos DVD con una cuidada selección de cintas remasterizadas del maestro del cine mudo. Las incluidas en la primera entrega son de 1915 y 1916, cuando Chaplin tenía poco más de 25 años y ya era una personalidad del cine, pero todavía le quedaban varias décadas de fructífera carrera.

Carlitos se enamora, Carlitos en el parque, Carlitos vagabundo y Carlitos principiante son las cuatro cintas incluidas en el DVD que llega a los kioscos. En total, 110 minutos de buen cine que ha resistido de manera soberbia el paso del tiempo. Se nota porque aun cuando es evidente que las cintas datan de los albores del lenguaje cinematográfico, los gags humorísticos (imitados hasta el hartazgo por tantos que han aprendido mucho de Chaplin) siguen siendo efectivos, siguen haciendo reír como siguen causando gracia Los Tres Chiflados, quienes –estos cuatro cortos lo demuestran– fueron profundamente influidos por el humor de clown y mimo de Chaplin.

En dos de estos títulos (Carlitos se enamora y Carlitos vagabundo) también se descubre algo que es una extravagancia en la ficción de hoy día: la mirada directa a cámara en gesto cómplice con el espectador. Esta ruptura de la “cuarta pared” sucede varias veces en el primer corto, y sólo una en el tercero, pero nunca la realiza Chaplin. Es que el artista británico cuidaba de mantenerse en el lugar del héroe protagonista con el que el público pudiera identificarse, algo que la mirada “a los ojos del espectador” dificulta.

En estas cuatro historias Chaplin toca varios de sus temas habituales, aprovechando para ello la gracia del vagabundo (The Tramp, en inglés), su personaje más famoso. La pobreza, las diferencias de clase, la búsqueda de oportunidades y el rebusque, los ponchazos con la autoridad y la figura de una señorita en problemas aparecen de un modo u otro, con recurrencia en su obra. Esta no es la excepción. Aún más, con frecuencia los temas se encadenan. En Carlitos se enamora y en Carlitos vagabundo, el amor es también promesa de un mejor pasar económico o compañía en la desgracia. Y sea haciéndose pasar por conde para conquistar el corazón de un mercader que prefiere colocar a su hija al mejor postor, o rescatando de los latigazos a una pobre chica obligada a fregar ropa, Charlot aparece siempre ahí con su bombín, su bastón, sus pantalones anchos y sus zapatones. Este modelo sirve también como caso de estudio del modelo tradicional (hoy en crisis) de la mujer en el cine, dependiente del hombre que debe “salvarla”. Y Charlot triunfa a pesar, o quizá gracias a su torpeza. Esa torpeza cómica que sigue en la pantalla grande incluso hoy, a través de sus lejanos herederos culturales británicos, como Mr. Bean.
Párrafo aparte para los rivales de turno del protagonista: mercaderes, nobles o carteristas, todos movidos por la avaricia y la intención de sacar provecho del otro, terminan recibiendo lecciones de Charlot en la forma de un slapstick compuesto de sopapos, bastonazos y, sobre todo, sólidas patadas en el trasero para terminar con la cara en el barro. Todo mezclado eso con ese andar bamboleante imposible de olvidar y el correteo de los personajes, ayudados por el efecto de cámara rápida, propio de una época en que el cine se hacía de a menos cuadros por segundo. Esa imagen acelerada que hoy es sinónimo de enredo cómico.

Como corresponde a la época, estas son películas mudas pero increíblemente expresivas. No sólo desde la gestualidad inigualable de Chaplin (que, justo es decirlo, estaba en una compañía estupenda), sino también desde la banda de sonido. Ya se trate de un piano solitario marcando el tempo con la ductilidad del instrumento, o de los contrapuntos entre una pequeña orquesta y un violín solista, la música no cesa y acompaña toda la acción. Y esa acción no para. Chaplin comprendía perfectamente la máxima aristotélica para la narración, de que cada parte debía llevar hacia adelante la historia. Esto es particularmente cierto para un cortometraje, donde no hay tiempo para planos superfluos ni subtramas.

Sea con la ternura de los piquitos en Carlitos se enamora, con el sigilo del rescate de la dama en Carlitos vagabundo, con el caos desopilante de Carlitos en el parque o con la competencia por el puesto de trabajo en Carlitos principiante, los cuatro films son una muestra imperdible de uno de los cineastas fundamentales del siglo XX.

*segunda entrega, primer domingo de Marzo
*dato importante: ediciones totalmente remasterizadas.

martes, 8 de enero de 2008

Un pequeño bar en una villa serrana ^^











Un pequeño bar en una villa serrana ^^




The Chaplin Collection




Películas a salvo


Las películas de Chaplin resisten al tiempo. Pero a fines de los 90, las copias habían envejecido y ya no podían proyectarse en los cines. Gracias a la Cinemateca de Bolonia, Italia, que las restauró, y a la firma francesa MK2, propietaria del catálogo, ese tesoro pudo ser preservado. Los herederos de Chaplin cedieron en 2001 a MK2 los derechos de explotación internacional de 18 grandes películas del cineasta. El monto de esa cesión no fue revelado- informa la agencia AFP- pero sí la condición que la acompañaba: que las películas pudieran volver a proyectarse en los cines. Desde 2001, unos 2,8 millones de DVD de sus películas se vendieron en el mundo. Donde menos las compraron fue en Estados Unidos.
Remasterizadas, excelente imagen, con mucha informacion extra. De Coleccion.

30 años...



Admito que me dejé estar, pero mas vale tarde que nunca.


Hizo reír sin dejar de tener una mirada crítica sobre el mundo en el que vivía. Defendió la libertad y estuvo del lado de los humillados; por eso fue acusado de procomunista. Sus películas son clásicos del cine universal.


El 25 de diciembre se cumplieron treinta años de la muerte de Charles Chaplin, uno de los grandes genios del siglo XX.

La vida del gran Carlitos se extinguió mientras dormía en su mansión de Vevey, Suiza, un lugar paradisíaco cercano al lago Leman. Tenía 88 años. El jueves 20 de diciembre, se vendió esta casa donde Charlot vivió su último cuarto de siglo. Un grupo inversor de Luxemburgo la compró en unos 30 millones de dólares. La intención de estos empresarios es transformar la residencia en un gran centro de exposición dedicado al actor y director inglés. El proyecto prevé la construcción de una sala de cine para doscientos espectadores, salas de exposición permanentes, un escenario exterior, una tienda y un restaurante.